Iberdrola multada por la muerte de aves rapaces en sus tendidos eléctricos
Desde esta página hemos denunciado muchas veces que una de las principales causas de muerte de aves en peligro de extinción es la electrocución en los cables de tendido eléctrico. Un problema que las compañías eléctricas pueden en algunos casos solucionar o, al menos, poner todo tipo de medidas para evitar el mayor número posible de víctimas.
Muchas de las aves que mueren en estos tendidos son rapaces en peligro de extinción, como los milanos, las águilas imperiales o las águilas perdiceras. Pero las compañías eléctricas, como Iberdrola, afirman que deberían de ser las administraciones públicas las que se encargaran de realizar los cambios necesarios en los tendidos y por ese motivo, se niegan a mejorarlos.
Por eso, la multa que el pasado mes de octubre ha condenado a Iberdrola al pago de 700.000 euros por la muerte de aves rapaces en sus tendidos eléctricos ha sido tomada como una estupenda noticia por parte de asociaciones amantes de las aves y ecologistas.
La multa ha sido impuesta por la Consejería de Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, que ha resuelto así varios expedientes sancionadores que había pendientes contra Iberdrola.
Debido a la mala praxis de esta compañía, se han electrocutado solo en lo que va de año un alto número de aves, echando por tierra todo el esfuerzo y la gran inversión económica de la Administración, que se esfuerza por repoblar los cielos de Castilla-La Mancha con estas aves.
La muerte de tantos ejemplares electrocutados hace imposible que aumente la población de rapaces e incluso es el motivo de que algunas de ellas hayan llegado a estar en peligro de desaparecer.
También se ha recogido la obligación de que la empresa modifique los tendidos, por lo que es de esperar que en poco tiempo se ponga solución al problema, a pesar de que Iberdrola se niega a reconocer su responsabilidad.
Son muchas las asociaciones que recriminan a esta empresa que trate de proyectar una imagen pretendidamente verde cuando luego suceden estas cosas ante la indiferencia de sus directivos que tratan de sacudirse toda responsabilidad en este problema.
Aunque esta noticia es de Castilla-La Mancha, el problema con los cables y los tendidos eléctricos es algo normal en toda España y no es exclusivo de Iberdrola, siendo una lucha que se lleva a cabo entre diferentes empresas y administraciones y que las asociaciones protectoras están denunciando desde hace años.